Poco se sabe sobre los sistemas de alimentación y requerimiento de nutrimentos para los verracos. En general, la mayoría de las granjas porcinas carecen de un programa específico de alimentación para sus verracos.
Normalmente se utiliza la misma dieta que reciben las cerdas gestantes y los niveles de alimentación que se establecen dependen de la condición corporal del animal, incrementándose o disminuyéndose la cantidad de alimento suministrado, según el verraco este pesado o liviano. Las razones para este tipo de alimentación son por facilidad, bajo costo de alimentación y la falta de información que contraindique esta práctica.
En cualquier sistema de alimentación que se practique, debemos tener presente que las diferentes estratégias alimenticias o la cantidad de nutrimentos que se suministren, no alterará la capacidad genética del animal y su habilidad de transmitirla a sus descendientes. Un sistema óptimo de alimentación permitirá al verraco alcanzar su máximo potencial genético y mantenerse en un estado óptimo de salud, que permita maximizar su eficiencia reproductiva relacionada a la cantidad y calidad del semen, especialmente para ser usados en inseminación artificial.
En el desarrollo de un programa de alimentación para verracos, tenemos que tener presente aquellos nutrimentos relacionados al desarrollo muscular y esquelético. El verraco en crecimiento contiene una mayor masa de tejido magro y esquelético que las hembras y los machos castrados por lo que presenta un mayor requerimiento de aminoácidos y minerales para la formación del hueso y del músculo. La estructura y fortaleza ósea de las patas es muy importante para el proceso de cruzamiento y su desarrollo es crítico si queremos que el verraco este activo en el proceso de monta durante un largo período.
El sistema más simple de alimentación consiste en dividir en dos etapas, una que involucra verracos jóvenes de los 50 kg hasta los 8 meses de edad y que se les debe suministrar la dieta de reemplazo en cantidades de 2 a 2,5 kg por día y la otra etapa es la de verracos adultos, que lo más fácil es darles de 2 a 2,5 kg de alimento por día, pero de la dieta de cerdas gestantes. EI día que el animal esta en monta se debe incrementar un 25% esa cantidad. También se puede utilizar una alimentación de frutas más un suplemento de proteína, en forma similar al de las cerdas gestantes.
El éxito en este programa de alimentación es controlar la condición corporal del verraco, evitando que se engorde o enflaquezca. En conclusión la alimentación del hato reproductor es esencial para obtener un éxito económico en la porqueriza y los rendimientos productivos y reproductivos dependerán del tipo de alimentación que se suministre a esos animales.
Fuente: Razas Porcinas.